También hay otros tres acusados, por el crimen del albañil

El tribunal integrado por los jueces Román Lanzón, Gustavo Pérez Urrechu y Nicolás Vico Gimena está encargado de juzgar el homicidio de un albañil que fue el desenlace fatal de un plan criminal ideado en Piñero. Cerca de las 18.30 del 24 de mayo de 2019, Cristian Gómez estaba frente a su casa en Villa Gobernador Gálvez junto su hijo Facundo y su cuñado Silvio descargando bolsas de material de un Fiat Palio gris cuando aparecieron tres personas con intención de robarles el auto. Según la acusación de la fiscal Marisol Fabbro, eran Rodrigo Cresta, Leandro Gutiérrez y un menor de edad que ya fue condenado por la justicia de menores. A pesar de que no se resistieron, Silvio fue herido de un disparo en el abdomen, del cual tardaría un mes y medio en recuperarse. Cristian y su hijo intentaron perseguir a los ladrones para recuperar el auto pero estos se defendieron a los tiros e hirieron a Cristian, quien falleció al día siguiente en el Hospital Provincial.

Este robo habría sido ideado en la Unidad Penitenciaria Nº11 de Piñero por Héctor “Gordo Dany” Noguera y Fernando Gómez Miqueas porque necesitaban un auto para perpetrar un ataque contra una banda rival. Sin embargo, debido a que haber dejado dos heridos atrajo demasiada atención, dieron indicaciones para que se deshicieran del auto, lo que no pudo llegar a concretarse. Pasada la medianoche el Palio fue identificado por la policía y se produjo una persecución camino a Pérez que terminó en Uriburu pasando Circunvalación. Los tres ocupantes lograron escapar por los cañaverales pero en el auto se encontró la pistola 9mm que fue utilizada en el homicidio de Gómez.

Gracias a intervenciones telefónicas ordenadas en otras causas, el 13 de junio de 2019 pudo ser detenido Rodrigo Cresta en un allanamiento en Rouillón al 3500. Posteriormente, en diciembre de 2020, Leandro Gutiérrez fue detenido luego de un intento de robo fallido en Lima al 3200 de Rosario.

Por estos hechos la fiscal Fabbro solicitó al tribunal que condena a Gutiérrez y a Cresta a prisión perpetua por los delitos de homicidio criminis causa agravado por uso de arma de fuego en grado consumado y tentado y portación ilegítima de arma de guerra, mientras que contra Noguera y Gómez Miqueas solicitó la pena de 18 años de prisión por robo calificado por arma de guerra en calidad de instigadores y encubrimiento agravado en calidad de coautores.

Por su parte, la defensora de los cuatro acusados cuestionó los elementos probatorios presentados por la fiscalía y dijo que la principal prueba, que son las escuchas telefónicas, no podrán vincularse con certeza a las voces de los defendidos por no haber sido realizado el cotejo técnico necesario. Además, ningún testigo podrá dar precisión sobre las características físicas de los atacantes, cuántos fueron ni cuántos disparos escucharon debido a lo descuidada que fue la investigación, por lo que solicitó al tribunal la absolución de todos por el beneficio de la duda.