Un suboficial de policía fue imputado este miércoles con prisión preventiva por 90 días por el asesinato a balazos de un joven de 20 años cometido el sábado pasado en barrio Las Flores, aunque el acusado denunció que se había tiroteado con la víctima cuando esta intentó robarle con una réplica.
El crimen por el que la fiscal Georgina Pairola acusó este miércoles de homicidio calificado al policía Juan Ceballos Rinaldi, “despachante” de la Comisaría 21º, con 16 años de antigüedad en la fuerza, fue cometido en Guardia Morada y Pasaje 513, uno de los sectores más empobrecidos del modesto barrio Las Flores.
La víctima fue Kevin Ezequiel Gómez, que tenía 20 años y vivía en Platón al 1900, cerca de donde cayó baleado. Recibió cinco disparos efectuados por el arma reglamentaria del policía involucrado en el hecho.
Según la imputación, el policía caminaba por la calle alrededor de las 11 del sábado en cumplimiento de sus funciones laborales cuando, por razones que aún se desconocen, disparó contra el joven. Tras el asesinato, el policía –que estaba de civil– avisó bajo código policial (código 5) de que había mantenido un enfrentamiento armado con un presunto ladrón.
A pesar del descargo del acusado, que expuso su versión acompañada de un croquis demostrativo, para la fiscal se trata de un homicidio doloso ya que la única arma encontrada en el lugar fue la del policía y una de “tipo utilería, la cual llevaba en su bolso personal”.
La fiscal explicó que hasta ahora no existe otro testimonio –además del que brindó el acusado– acerca de un enfrentamiento y un intento de robo, que fue lo que el policía hizo constar en el acta del procedimiento. Por eso, la fiscal acusó al uniformado homicidio calificado por abuso de función o cargo en su carácter de miembro de las fuerzas públicas, y por falsedad ideológica.
El juez Mariano Aliau tuvo por formalizada audiencia imputativa y dictó la prisión preventiva efectiva por el plazo de 90 días al policía, quien brindó su testimonio en la audiencia y ratificó su versión de los hechos.