Milton Uriel “Chicho” Imperiale tenía 16 años cuando fue asesinado hace dos años de una puñalada en una vivienda de Piazza al 200 de Villa Gobernador Gálvez. Este jueves dos hermanos de apellido Gómez aceptaron su responsabilidad en el caso y acordaron penas de 12 y 6 años respectivamente.

A través de videoconferencia, el tribunal compuesto por los jueces Rafael Coria, Nicolás Vico Gimena y Rodolfo Zvala resolvieron homologar el procedimiento abreviado presentado por el fiscal Alejandro Ferlazzo y aceptado por la defensa y con el consentimiento de las víctimas.

Leandro “Carabina” Gómez, de 26, fue condenado a 12 años de prisión por homicidio simple. Y su hermano a Maximiliano Gómez, de 29, a la pena única de 6 años de prisión efectiva por los delitos de homicidio en carácter de participe secundario en concurso real con amenazas coactivas y violación de las medidas contra una epidemia en calidad de autor.

Chicho vivía en Edison y La Ribera con su madre y dos hermanos más chicos, en la zona costera de Villa Gobernador Gálvez. Su le fue arrebatada el miércoles 20 de noviembre de 2019 en una vivienda de Piazza al 256, donde vivía Brisa, la hermana de los condenados. Allí se generó un conflicto entre Brisa y sus hermanos, en el cual Chicho decidió interceder para defender a la chica. Todo terminó de la peor forma.

Leandro “Carabina” Gómez, detenido a pocas horas del hecho aceptó haber apuñalado hasta la muerte a Chicho Imperiale. “Hasta en la audiencia no supo explicar por qué lo mató; no tiene explicación, lo mató por matar. Esta rata no sabe el mal que hizo”, se había quejado en las redes un familiar de Chicho cuando Carabina fue imputado.

Esa noche fatal, Maximiliano Gómez intentó agredir a al primo de Chicho imposibilitando que éste le prestara ayuda a la víctima. Además de que al salir de la vivienda le profirió amenazas a una mujer con el objeto que no llamara a la Policía, señaló la acusación. En el lugar fue hallada el arma homicida, un arma blanca de 35 centímetros.

Maximiliano fue detenido en marzo de 2020 cuando circulaba por la colectora de Avenida de Circunvalación al 2700, en el cruce con 27 de Febrero, y fue interceptado por un retén policial que controlaba el cumplimiento de la cuarentena obligatoria. Le pidieron los documentos y al identificarlo le saltó un pedido de captura.

Foto: Milton Imperiale