Las penas van desde los 7 hasta los 21 años de prisión, por el crimen de Vera

En un juicio que mantuvo en vilo a la sociedad rosarina, el Tribunal integrado por los jueces Florentino Malaponte, Alejandro Negroni y Carlos Leiva, condenaron a cinco individuos por su participación en el homicidio de Ángel Agustín Vera, ocurrido el 20 de febrero de 2021, así como en una serie de robos violentos que incluyeron amenazas y uso de armas de fuego.

La sentencia más grave fue para Marcos Rogelio Gálvez, quien recibió una condena de 21 años de prisión por su coautoría en el homicidio agravado por el uso de arma de fuego. Los acusados Andrés Alberto Martínez, César Evaristo Gálvez y Jonatan Rodrigo Díaz fueron sentenciados a 16 años de prisión cada uno por los mismos cargos, mientras que Jonatan Joel Catalán, quien estuvo involucrado en uno de los robos, recibió 7 años de prisión efectiva.

El homicidio de Vera, un caso que conmocionó a la ciudad, ocurrió a plena luz del día, cuando los acusados persiguieron a la víctima por varias calles de Rosario hasta lograr acorralarla en un domicilio en Coliqueo al 1500. Allí, tras ingresar al hogar de la víctima, le dispararon varias veces, provocándole la muerte por hemorragia masiva. Este acto fue el colofón de una persecución implacable en la que los acusados intentaron escapar para evitar ser detenidos.

El fiscal de la Unidad de Homicidios Dolosos presentó pruebas que demostraban la intencionalidad de los acusados, quienes, además, portaban armas de fuego de manera ilegal. En el caso de los robos, también se logró probar que varios de los condenados participaron en otros hechos delictivos, como el robo de un vehículo y la intimidación de víctimas con armas de fuego.

Además, se sumaron a la causa otros robos ocurridos durante 2022, donde los acusados también emplearon violencia y amenazas. Por ejemplo, en octubre de 2022, Jonatan Díaz y Jonatan Catalán participaron en un robo con arma de fuego, sustrayendo un vehículo y huyendo de la escena tras efectuar un disparo.

Finalmente, el caso de Ezequiel Villarruel, quien había sido condenado en julio de 2024, también fue parte de este entramado delictivo, ya que estuvo involucrado en un robo con uso de arma de fuego en complicidad con otros.