Padre e hijo fueron sentados en el banquillo de los acusados por el crimen de Rubén Guzmán en ocasión de robo

Este martes comenzó el juicio oral por el homicidio de Rubén Guzmán y el intento de homicidio de su esposa, ocurrido en la tarde del 12 de febrero de 2023. El Tribunal, compuesto por los jueces Silvana Lamas, Gonzalo López Quintana y Nicolás Foppiani, escuchará durante las próximas semanas los testimonios y las pruebas presentadas por la Fiscalía, que atribuye a los acusados Miguel Ángel “Lito” Arce de 42 años y a su hijo Ariel Nicolás Arce de 22, varios delitos graves, incluyendo homicidio calificado, robo calificado y portación ilegítima de armas de fuego.

El caso, que conmovió a la comunidad de Rosario y al barrio de Arroyito, cuando los dos acusados interceptaron a las víctimas, mientras descendían de su Fiat Strada en José Ingenieros al 1800. De acuerdo con la acusación, Miguel Ángel Arce, quien se encontraba acompañado de su hijo Ariel, intentó sustraer las pertenencias de las víctimas. Para ello, los agresores utilizaron armas de fuego para intimidar a las personas y en el transcurso de un violento forcejeo, Miguel disparó contra ambos, impactando la pareja en el muslo y a Rubén Guzmán en el abdomen, lo que provocó la muerte de este último el 29 de abril de 2023, luego de haber permanecido varios meses en el Hospital de Emergencias Clemente Álvarez (HECA).

Tras los disparos, los imputados robaron una mochila que pertenecía a la pareja y el vehículo de las víctimas, el cual abandonaron horas más tarde, tras sustraer pertenencias de valor como teléfonos móviles y documentos. El Fiscal Alejandro Ferlazzo solicitó que ambos acusados reciban una pena de prisión perpetua, al considerarlos responsables de un hecho particularmente grave y cruel, con el agravante de haber actuado con la intención de conseguir impunidad mediante el homicidio.

La trayectoria delictiva de los acusados

Miguel “Lito” Ángel Arce ya contaba con antecedentes penales antes de este hecho. En mayo de 2018, había sido condenado a 6 años y 8 meses de prisión por delitos como robo calificado, privación ilegítima de la libertad y atentado contra la autoridad. Sin embargo, Arce se encontraba gozando del beneficio de salidas transitorias en el momento en que cometió el crimen de Arroyito. Por su parte, Ariel también posee antecedentes, habiendo sido detenido en diversas ocasiones por hechos delictivos, como un robo y un intento de fuga de la policía, sin tener en cuenta que vienen de una familia conflictiva, donde sus hermanos mayores y hasta el propio padre, purgaron condenas por robo

Ferlazzo también destacó la particularidad del caso, ya que los imputados actuaron de forma planificada y con premeditación, con el objetivo de robar un vehículo y asegurar su huida a toda costa, incluso si ello implicaba matar a las víctimas.

En los próximos días, la defensa de Miguel Ángel y Ariel Nicolás Arce presentará sus argumentos ante el tribunal, mientras que la Fiscalía continuará buscando pruebas que refuercen la acusación de homicidio calificado y otros delitos graves. El caso de Arroyito, que arrancó el 18 de febrero, podría convertirse en un punto de inflexión para las políticas de seguridad y justicia en Rosario, donde los habitantes piden a gritos un cambio en la dinámica de la violencia urbana.