Todos los incidentes fuera de la cancha, tras la caída de Newells en el Coloso
A la salida del estadio, una serie de incidentes violentos involucraron a simpatizantes de Newell’s Old Boys, personal policial y vehículos de seguridad, con el saldo de varios móviles dañados y agentes lesionados.
Ayer por la tarde, tras finalizar el cotejo, donde nuevamente el equipo del parque cayó ante Rosario Central, se generó un caos en la salida del estadio con simpatizantes rojinegro. La denuncia apuntaba a que varios hombres, vestidos con ropa identificatoria del club, intentaban ingresar al sector de los estacionamientos. Ante este panorama, varias patrullas llevaron al lugar para intervenir.
Al llegar a la intersección de Pellegrini y Rodríguez, las fuerzas de seguridad fueron emboscadas por un grupo de simpatizantes que salían del estadio, quienes comenzaron a agredir a los agentes con piedras y objetos contundentes. La situación se tornó aún más violenta y las unidades móviles resultaron severamente dañadas por los ataques. Para defenderse de la agresión, los efectivos respondieron con disparos de escopetas provistas con cartuchos antitumulto, solicitando refuerzos.
A medida que la confrontación se intensificaba, los móviles de la policía fueron atacados en diversos puntos de la zona. En Pellegrini, entre Ovidio Lagos y Ricchieri, los efectivos fueron atacados nuevamente. El oficial Juan Icho resultó herido en su rostro por un impacto de un objeto contundente. La situación empeoró cuando el oficial Novillo, al sentirse superado por el número de agresores, realizó varias detonaciones con su arma de fuego para proteger a sus compañeros y retirarse del lugar.
La violencia no cesó y, cuando los refuerzos llegaron a la intersección de Pellegrini y Callao, también fueron atacados. Los móviles 10858 y 10923 fueron dañados y la suboficial Osuna resultó con una escoriación en su brazo izquierdo.
La situación se completó cuando se observó a algunos individuos intentando ingresar a un domicilio en la zona, procediendo a la aprehensión de dos personas: Marcos Santiago de 25 años y María Belén R de 30. Posteriormente, las unidades se desplazaron hasta Avellaneda y Pasaje Independencia para continuar con las actuaciones correspondientes.
En ese lugar, una mujer comenzó a increpar a los agentes y arrojó una botella contra ellos, por lo que fue inmediatamente detenida. A las 22, intervino la Fiscalía de Flagrancia, quien ordenó las siguientes medidas: se formó una causa por tentativa de robo agravada en banda para Santiago, quien fue liberado bajo el artículo 218 del Código Procesal Penal, mientras que la mujer fue acusada de actos turbatorios en la vía pública, conforme al Código de Convivencia Civil.
Los daños a los vehículos de la policía fueron considerables, con al menos 11 móviles afectados en total. Los oficiales Icho y Osuna, aunque heridos, se encuentran fuera de peligro. También se destaca un ataque a piedrazos contra una autobomba de los Bomberos Voluntarios, donde le rompieron el parabrisas y contenedores de residuos incendiados entre otros desmanes que se registraron sobre Pellegrini. El saldo de este violento episodio deja una reflexión sobre la creciente conflictividad en las inmediaciones de los estadios y la seguridad pública.
La violencia en las inmediaciones de los estadios sigue siendo un tema de preocupación, con incidentes que involucran tanto a los hinchas como a las fuerzas de seguridad. Es fundamental reflexionar sobre cómo se pueden implementar medidas de seguridad más eficaces para prevenir situaciones como estas, que generan no solo daños materiales, sino también lesiones físicas a los agentes encargados de velar por el orden público.