Durante la temporada estival, la Secretaría de Control intensificó los operativos en puntos clave de Rosario

La Municipalidad de Rosario implementó, durante los meses de diciembre y enero, un riguroso control vehicular en las principales zonas de la ciudad, con el objetivo de garantizar la seguridad vial y prevenir accidentes. A través de la Secretaría de Control, se realizaron más de 19.000 inspecciones en todo el territorio rosarino, con un enfoque especial en las zonas de mayor afluencia, como La Florida y el corredor norte.

Un verano de intensos operativos

Con la llegada del calor y el aumento del flujo turístico, el municipio reforzó los operativos preventivos, tanto antipicadas como de control de alcoholemia. Entre las medidas más destacadas, se realizaron 19.912 controles vehiculares, de los cuales 2.890 vehículos fueron remitidos al corralón por diversas infracciones. Además, se realizaron 8.902 controles de alcoholemia, detectando a 223 conductores con niveles de alcohol en sangre por encima del límite permitido. Esta cifra representa un 2,5% de los conductores testeados, lo que muestra una leve disminución respecto a años anteriores.

“Como lo pidió el intendente Pablo Javkin, la seguridad y el orden son una prioridad para nosotros. Vamos a seguir trabajando en promover conductas responsables en todas las áreas de la ciudad”, afirmó Diego Herrera, secretario de Control y Convivencia. Según Herrera, la Secretaría de Control trabajó durante todo el día, con especial énfasis en la prevención de picadas, un fenómeno que se repite cada verano en las calles de Rosario.

Refuerzo en las zonas más problemáticas

Los operativos se concentraron principalmente en puntos estratégicos como La Florida, el puente Rosario-Victoria, el Parque Escalabrini Ortiz, y las zonas aledañas a los clubes y guarderías náuticas. En total, entre noviembre y enero se realizaron 8.486 controles en estos sectores, con 650 vehículos remitidos al corralón, 144 de ellos con alcoholemia positiva. En cuanto a las picadas, se llevaron a cabo intervenciones diarias, incluso en triples turnos durante los fines de semana, logrando así una reducción de este tipo de prácticas ilegales.

Además, la Municipalidad puso énfasis en el control de motos, que continúan siendo uno de los vehículos más infractores en la ciudad. Durante el 2024, se remitieron al corralón 15.175 motos, siendo el 67% de las remisiones por irregularidades en las patentes. Este año, en enero, se registraron 654 casos de infracciones relacionadas con el mal estado o la falta de patente.

Otras medidas de control

Los operativos no solo se centraron en el tránsito vehicular. También se realizaron acciones para desbaratar la venta ambulante ilegal y el expendio de alcohol sin habilitación en áreas como La Rambla Cataluña. En un operativo conjunto con la Policía provincial, el 28 de diciembre se logró desmantelar varios puestos irregulares en la zona de Carrasco al 3000, donde se comercializaba alcohol sin autorización y se reproducía música a alto volumen.

“Seguimos con la implementación de controles exhaustivos para asegurar que todos los rosarinos y visitantes puedan disfrutar de la ciudad de manera segura y ordenada”, explicó Herrera, quien destacó que las intervenciones seguirán con el mismo ritmo durante todo el año.

Un esfuerzo constante por la seguridad

La estrategia de control en Rosario busca ir más allá de la simple sanción, ya que, según las autoridades municipales, el objetivo principal es fomentar el cumplimiento de las normas de tránsito y de convivencia. Los operativos, que incluyen controles de documentación, verificación de patentes y el uso de elementos de seguridad, son realizados en conjunto con efectivos de la Policía provincial y, en algunos casos, con fuerzas de seguridad federales.

El balance de los primeros meses del 2025 muestra que Rosario sigue avanzando en la mejora de la seguridad vial, mientras se continúa trabajando para reducir la siniestralidad y promover una ciudad más ordenada y segura para todos.