Fue imputado bajo la figura de homicidio simple con dolo eventual
El asesino de Tania Gandolfi y Agustina Magali García, quedó en prisión preventiva por el plazo de ley. Las fiscales; Mariana Prunotto y Valeria Piazza Iglesias, acusaron a López Gagliasso de ser responsable de los homicidios de Tania Daniela Gandolfi de 40 años y su hija Agustina Magali García de 17 años, ambos bajo la figura de homicidio simple con dolo eventual. Además, le imputaron el delito de lesiones leves por dolo eventual en concurso ideal, debido a las heridas sufridas por otras tres personas en el accidente.
El siniestro, que conmocionó a la comunidad rosarina, ocurrió la noche del 21 de enero en la intersección de Avenida Arturo Illia y Presidente Roca. López Gagliasso al volante de un Peugeot 206 gris, inició una persecución a gran velocidad luego de un altercado con un motociclista en el túnel de la mencionada avenida. Según la investigación, el imputado aceleró el vehículo hasta alcanzar los 120 km/h, es decir, el doble de la velocidad permitida para esa zona, que es de 60 km/h. En ese contexto, López Gagliasso realizó maniobras de sobrepaso en zigzag, lo que provocó que perdiera el control del auto, derrapando hasta subir a la vereda, donde impactó de forma brutal a la familia García.
El resultado fue trágico: Tania Gandolfi y Agustina García murieron en el acto. Por su parte, Victoria García de 6 años, Diego Alberto García, de 45 años y Giovana Sol Romero de 20 años, resultaron heridos, aunque con lesiones de menor gravedad, esta última cabe mencionar que iba como acompañante de López Gagliasso y en su declaración, se desligó de responsabilidades, tales como; no ser la pareja o mantener una relación amorosa y de solicitarle en reiteradas oportunidades deponer la actitud
La acusación de dolo eventual
La fiscalía sostiene que López Gagliasso actuó con dolo eventual, un término jurídico que implica que el imputado se representó el resultado de sus actos como una posibilidad seria y no desistió de continuar con su conducta peligrosa. Para argumentar esta acusación, se tuvo en cuenta que, a pesar de las condiciones de tránsito en una zona concurrida, el imputado continuó su conducción a gran velocidad sin tomar medidas para evitar un accidente.
El hecho ocurrió en una zona de alto tránsito, próxima a un parque y con numerosas personas en las veredas, por lo que la posibilidad de que el vehículo impactara con peatones era alta. Según las fiscales, López Gagliasso asumió ese riesgo al no frenar ni modificar su comportamiento ante el peligro inminente. Esta actitud, que refleja una indiferencia ante el valor de la vida humana, fue determinante para que la jueza de primera instancia, Dra. Aguirre, dispusiera la prisión preventiva efectiva para el imputado. A esto se le sumaron las declaraciones de testigos, quienes manifestaron la indiferencia de López Gagliasso, tras colisionar, al bajarse y ser encarado por el padre y marido de las víctimas, este se preocupó más por los daños del auto, que por las dos mujeres a las que les quitó la vida
La importancia del testimonio clave
Uno de los momentos clave en la audiencia fue el testimonio de la acompañante de López Gagliasso, quien estuvo presente en el vehículo durante el trágico accidente. Giovana Sol Romero, que también resultó herida, declaró que al inicio de la persecución, había intentado advertir al imputado sobre el peligro que representaba su accionar, pidiéndole que frenara para evitar una tragedia. Sin embargo, López Gagliasso hizo caso omiso a la advertencia y continuó acelerando.
Este testimonio fue fundamental para la calificación del hecho como un homicidio con dolo eventual. La Fiscalía explicó que la declaración de la acompañante encuadra perfectamente en el contexto de lo que ocurrió, ya que López Gagliasso no solo ignoró la advertencia de la joven, sino que continuó con maniobras peligrosas que resultaron fatales.
Además, el análisis de las cámaras de seguridad y las pruebas periciales en el lugar del accidente refuerzan la hipótesis de que el imputado actuó con total indiferencia ante la vida de las víctimas. El informe accidentológico concluyó que el vehículo no mostró signos de frenada antes del impacto, lo que confirma que el acusado no intentó evitar el choque.
La investigación continúa
A pesar de la fuerte evidencia recolectada, la investigación sigue abierta. Uno de los aspectos más relevantes es la identidad del motociclista que inició la disputa con López Gagliasso en el túnel. Hasta el momento, el motociclista no ha sido identificado y la Fiscalía continúa trabajando para esclarecer su participación en los hechos. La versión de que el altercado entre López Gagliasso y el motociclista fue lo que desencadenó la persecución será parte de los elementos a analizar en el futuro proceso judicial.
La Fiscalía ha agradecido la colaboración de la comunidad rosarina, que ha aportado material probatorio clave para la investigación. Asimismo, se han realizado relevamientos de cámaras de seguridad en toda la zona para obtener una visión más amplia de los hechos y determinar si hay más personas involucradas o testigos que puedan arrojar luz sobre lo sucedido.
Un caso que marca un precedente
El caso de Tania Gandolfi y Agustina Magali García es un trágico recordatorio de los riesgos inherentes al comportamiento imprudente al volante. Si bien la causa aún está en proceso, el hecho de que se haya calificado el incidente como homicidio simple con dolo eventual representa un paso importante en la jurisprudencia sobre accidentes viales en la ciudad de Rosario. La Fiscalía ha señalado que este tipo de casos, donde se pone en riesgo la vida de las personas sin conciencia del peligro, será tratado con la misma severidad en el futuro.
Por otro lado, el dolor de la familia García es indescriptible. La noticia de las muertes de Tania y Agustina ha dejado una herida profunda, especialmente por la situación de la hija menor, que aún desconoce el fallecimiento de su madre y hermana. La Fiscalía, en este sentido, también ha solicitado el apoyo de la ciudadanía para ayudar en la recuperación de un celular perdido (TCL de color blanco) en el lugar del accidente, que contiene las últimas fotos de las víctimas.
Mientras tanto, la justicia sigue su curso, y la sociedad rosarina espera que este lamentable suceso no quede impune, y que sirva como un llamado de atención sobre la importancia de la responsabilidad al conducir.