La acción se realizó en dos domicilios de los Fonavis de Grandoli

Rosario sigue avanzando en su lucha contra el narcotráfico y la violencia asociada. Esta mañana, se llevó a cabo una nueva inactivación de puestos de venta de estupefacientes en el marco de un operativo judicial coordinado entre el Ministerio de Justicia y Seguridad de Santa Fe y el Ministerio Público de la Acusación. Los procedimientos, que comenzaron a las 8:30, se centraron en dos departamentos vinculados a la venta de drogas en la zona sur de la ciudad.

Este nuevo operativo de inactivación de puntos de venta de estupefacientes se realizó en Rosario, en la intersección de Sánchez de Thompson al 100 y al 200 bis, en departamentos ubicados en los complejos Fonavi de Grandoli. La acción, estuvo a cargo del Ministerio de Justicia y Seguridad de la provincia de Santa Fe, en conjunto con el Ministerio Público de la Acusación (MPA).

El Ministro de Justicia y Seguridad, Pablo Cococcioni, se expresó sobre el operativo, señalando que la medida se inscribe dentro de una serie de acciones judiciales que buscan erradicar puntos de venta de drogas y actividades ilícitas en diversos puntos de la ciudad. En el caso de uno de los departamentos, vinculado a la pareja de René Ungaro, se había realizado un secuestro de estupefacientes que incluso fue puesto a disposición de la Justicia Federal. Sin embargo, esto no impidió que, a nivel local, se continuara con el proceso de inactivación del lugar.

“Lo que estamos haciendo hoy es un procedimiento que, mediante el bloqueo físico de las aberturas, impide que estos departamentos sean utilizados nuevamente para actividades delictivas. Es una medida de inactivación coercitiva para evitar que se sigan cometiendo delitos de microtráfico, entre otros”, afirmó Cococcioni. El ministro subrayó que, si bien estos procedimientos se originaron con la ley de microtráfico, la reforma procesal penal permite ahora extenderlos a cualquier inmueble usado para actividades delictivas, lo que ha agilizado y ampliado las posibilidades de intervención judicial.

Por su parte, el fiscal Franco Carbone destacó que estos operativos son el resultado de una investigación que comenzó con un tiroteo contra un colectivo en la zona de Espiro y Grandoli, ocurrido el 5 de septiembre pasado. Tras varios allanamientos, se logró identificar que el lugar de los hechos estaba vinculado a la venta de drogas. En uno de los departamentos se encontraron 9 kilos de cocaína, mientras que en otro se secuestraron armas de fuego y material relacionado con el narcotráfico.

“Este procedimiento forma parte de una serie de allanamientos que nos permitió desarticular una red de venta de estupefacientes, en la que participaron tanto adultos como menores de edad. Gracias al trabajo coordinado con la Policía de Investigaciones, hemos logrado asegurar el bloqueo definitivo de estos puntos de venta”, agregó Carbone.

Con la inactivación de estos puntos, se espera que la venta de estupefacientes en la zona se vea gravemente afectada, contribuyendo a reducir la presencia de drogas en las calles y generando un impacto positivo en la seguridad pública.

El impacto de la reforma procesal y la lucha contra el narcotráfico

La intervención judicial de hoy resalta el impacto de la reforma procesal y la colaboración entre diversas instituciones del Estado en la lucha contra el narcotráfico. A través de medidas como la inactivación coercitiva de inmuebles, las autoridades buscan cortar de raíz las actividades delictivas que se desarrollan en estos puntos, al tiempo que protegen la integridad de la comunidad.

Cococcioni también destacó que este tipo de medidas son parte de una estrategia más amplia que incluye la desarticulación de organizaciones criminales y la mejora de la calidad de vida en los barrios afectados por el microtráfico. “Hoy estamos tomando medidas firmes, pero debemos seguir trabajando de manera conjunta para que estos operativos tengan un impacto real y sostenible”, concluyó el ministro.