Dos hechos delictivos tuvieron lugar en las últimas horas
Dos jóvenes fueron aprehendidos tras intentar robar una motocicleta, mientras que en otro sector de la ciudad, un conflicto familiar derivó en amenazas y la incautación de un arma de fuego
Alrededor de las 19:30, dos jóvenes fueron aprehendidos en Cerrito y Esmeralda tras intentar robar una motocicleta. Según informaron fuentes policiales, la Central de Emergencias del 911 recibió un llamado que alertaba sobre dos sospechosos intentando encender una moto que aparentemente había sido sustraída. Al llegar al lugar, los oficiales observaron a los jóvenes manipulando los cables de una Zanella Styler 150 Cruiser, aparentemente sin la llave de ignición. La moto estaba dañada y evidenciaba signos claros de haber sido forzada.
Los detenidos fueron identificados como Yair Joaquín D. de 17 años y Thiago Tomás S. de 15. Ambos fueron aprehendidos en el lugar y trasladados a la Comisaría 2º, donde labraron las actuaciones correspondientes. En el procedimiento secuestraron la Zanella, que fue trasladada para realizar las pericias pertinentes. La Fiscalía de Menores, a cargo del Dr. Di Giorgio, intervino en el caso, quienes se hicieron cargo de entregar a los jóvenes a sus progenitores
Amenazas y tenencia ilegal de arma de fuego
En esta ocasión, los oficiales fueron convocados a un domicilio de calle Barra al 1200 bis, donde se había desatado un conflicto familiar. La denuncia fue realizada por una joven de 23 años, quien alegó que su exmarido, Claudio Marcelo V.T de 51 años, no le permitía ver a su hijo, y que además había sido amenazada de muerte por el padre de la actual pareja de su ex.
Al llegar al lugar, los oficiales interrogaron a ambas partes involucradas. Valentina relató que al presentarse en la casa de su ex, comenzó a gritar y exigirle que le permitiera ver a su hijo, lo que derivó en una discusión en la que Claudio la amenazó de muerte. Ante la gravedad de la situación, Claudio entregó voluntariamente un arma de fuego tipo pistolón calibre 36, de doble caño, sin marca visible, con mango de madera recubierto con cinta aisladora negra. Además, se encontraron 10 cartuchos intactos de calibre 36 dentro de una caja de cartón roja de la marca Orbea