Les imputaron 36 hechos  cometidos entre 2020 y 2024, contra el Banco Macro

Ayer por la tarde, se llevó a cabo una audiencia imputativa en la que la jueza de Primera Instancia Melania Carrara resolvió dictar prisión preventiva para cinco personas acusadas de integrar una red de estafas millonarias. Los imputados son: Manuel Fabián Sosa, Lionela María Jesús Villa, María Belén Villa, María Sofía Villa y Valentina Clarisa Villa, quienes enfrentan graves cargos de asociación ilícita y estafa en varios hechos ocurridos entre 2020 y 2024.

La acusación recae sobre los imputados por formar parte de una organización criminal que ejecutaba maniobras defraudatorias para obtener dinero de forma ilegal. En total, se les atribuyen 36 hechos de estafa en los cuales se habrían realizado diversas maniobras para apropiarse de fondos de clientes de una institución bancaria, algunos de los cuales ya habían fallecido.

La Fiscalía, encabezada por el fiscal Carlos Covani, presentó pruebas que revelan cómo los imputados habrían operado en el marco de una estructura criminal bien organizada. Según la acusación, la red utilizaba cuentas bancarias de clientes fallecidos para realizar movimientos ilegales. Entre las tácticas utilizadas, se encuentran la creación y enrolamiento de cuentas de homebanking sin el consentimiento de los clientes, lo que permitió a los acusados realizar préstamos a su nombre y transferir grandes sumas de dinero a cuentas propias de las imputadas. Esta maniobra fue ejecutada en al menos 34 ocasiones, siempre con el objetivo de apropiarse del dinero de los damnificados.

Uno de los episodios más destacados en la investigación es el intento de María Sofía Villa de realizar una operación fraudulenta por teléfono. En esta oportunidad, intentó cargar dinero a una línea particular utilizando una tarjeta de pago a nombre de una víctima, operación que fue frustrada por el banco, ya que la tarjeta y la cuenta habían sido dadas de baja.

En cuanto a Manuel Fabián Sosa, se le atribuyen al menos dos retiradas de dinero en cajeros automáticos, utilizando fondos que habían sido transferidos de cuentas de personas perjudicadas por la organización. A pesar de las evidentes pruebas en su contra, Sosa y las demás imputadas, como los miembros de la familia Villa, continuaron con la operación de su red fraudulenta durante un largo período.

La jueza Carrara, al evaluar los elementos de prueba presentados por el fiscal, dictó la prisión preventiva para los miembros de la organización. En el caso de las acusadas Lionela María Jesús Villa, María Belén Villa y María Sofía Villa, la medida de prisión preventiva será efectiva por el plazo establecido por la ley, mientras que para Manuel Fabián Sosa y Valentina Clarisa Villa, la prisión preventiva se extiende por 30 días. La resolución tiene como objetivo garantizar la continuidad de la investigación y evitar que los imputados entorpezcan el proceso judicial.

Este caso pone de relieve la magnitud de la estafa, que abarca varios años y cientos de miles de pesos defraudados, afectando no solo a personas fallecidas, sino también a otros clientes de la entidad bancaria afectada