Este jueves será formalmente acusado de corrupción en los Tribunales Federales
La situación del magistrado se agrava ante las evidencias presentadas por tres fiscales, y su vínculo con funcionarios públicos y empresarios está bajo investigación. El juez Marcelo Bailaque, al frente del Juzgado Federal N° 4 en Rosario, ha sido citado para una audiencia penal este jueves 21 de noviembre, donde se formalizarán las acusaciones en su contra por tres causas diferentes. Esta citación, que se llevará a cabo en los Tribunales Federales de Rosario, se da en el contexto de una serie de investigaciones iniciadas a raíz de los 8000 mensajes encontrados en los teléfonos de Carlos Vaudagna, jerárquico de la ex AFIP en Rosario.
La audiencia será dirigida por tres fiscales federales, quienes expondrán pruebas contra Bailaque relacionadas con presuntos actos de corrupción. Una de las causas está vinculada a su relación con Gabriel Mizzau, contador personal del juez y de un entramado empresarial ligado al narcotraficante condenado Esteban Alvarado. Otra causa involucra una presunta confabulación para extorsionar y obtener beneficios con funcionarios de la AFIP, Aduana y la Hidrovía, originada en un caso contra un agente bursátil. La tercera causa se mantiene en reserva, pero está relacionada con el manejo de fondos por miles de millones de pesos en beneficio de un financista, cuyo nombre también aparece vinculado al juez en cuestiones sociales y personales.
Bailaque se presenta ante la justicia con la defensa del abogado Claudio Puccinelli, mientras la situación se torna cada vez más complicada. Si bien su entorno sugiere que podría haber intereses políticos detrás de las acusaciones, la evidencia presentada hasta el momento parece sólida. En el ámbito político, su figura es vista como “transversal”, cercana a distintas facciones del poder, lo que ha generado especulaciones sobre su futuro profesional y político.
Mientras tanto, el Consejo de la Magistratura y el Ministerio Público Fiscal continúan monitoreando el caso, conscientes de que las pruebas contra Bailaque son contundentes y podrían derivar en su destitución. El juez, que se encuentra actualmente en funciones y de turno, deberá enfrentar este jueves un panorama incierto ante la justicia.