Suma una trama de estafa, intimidación pública y narcotráfico
En un nuevo capítulo de una trama que parece sacada de una película, Mariana Ortigala, quien ya imputada por narcotráfico, enfrenta ahora acusaciones por estafa y amenazas. Junto a su pareja, se habría quedado de manera ilegal con una casa en Funes, propiedad de los herederos de un hombre fallecido en 2021. La víctima, según la fiscalía, fue obligada a firmar un boleto de compraventa bajo presión, mientras que los herederos fueron intimidados para que no reclamaran sus derechos. La situación se torna aún más sorprendente al conocerse que Ortigala, le prestó o alquiló el sitio a Vanesa Barrios, la mujer del “Guille” Cantero, para que cumpla con el arresto domiciliario, impuesto por la justicia Federal por narcotráfico en la misma propiedad que había usurpado.
La compleja trama comenzó con la muerte de un hombre en 2021. Antes de fallecer, y bajo lo que los fiscales consideran un abuso de confianza, firmó un boleto de compraventa a favor de Mariana Ortigala. Sin embargo, esta operación nunca se concretó. Al enterarse de la situación, los herederos legítimos de la propiedad, ubicada en Alberdi al 1400 de Funes, intentaron recuperarla. Pero se encontraron con la férrea oposición de Ortigala y su pareja, quienes los amenazaron para que desistieran de sus reclamos.
Vanessa Barrios, esposa del líder de Los Monos, Guille Cantero, se convirtió en la ocupante de una propiedad que había sido usurpada. Esta situación ha generado un fuerte impacto en la opinión pública y ha llevado a cuestionar la efectividad de las instituciones encargadas de hacer cumplir la ley.
Declaraciones de Ortigala:
En sus declaraciones, Ortigala ha intentado justificar sus acciones y ha realizado acusaciones contra la estructura judicial. Sin embargo, los fiscales han desestimado sus dichos, considerando que busca únicamente obtener beneficios judiciales.
Este caso plantea interrogantes sobre la seguridad jurídica y la capacidad del sistema para proteger los derechos de los ciudadanos. La impunidad con la que Ortigala ha actuado, así como su vinculación con el mundo del narcotráfico, generan una profunda preocupación.
Es fundamental que se esclarezcan todos los hechos y que los responsables sean llevados ante la justicia. La sociedad exige respuestas y medidas concretas para combatir la corrupción y la impunidad.