Un macabro descubrimiento tuvo lugar este jueves en una vivienda de Barrio Hospitales
Este jueves, no fue tan santo, el cuerpo sin vida del propietario de una vivienda usurpada fue encontrado atado a su cama, desatando una investigación judicial para esclarecer las circunstancias de su deceso y la misteriosa ocupación del inmueble. Un velo de misterio y horror cubrió la denominada Villa La Lata cuando, ante la denuncia de vecinos por la usurpación de una vivienda ubicada en la calle Gaboto al 1300, la policía se encontró con una escena dantesca. En el interior del inmueble, yacía el cuerpo sin vida de su dueño, un hombre de aproximadamente 35 años, identificado como Guido Fernández, atado a su lecho. El avanzado estado de descomposición del cadáver sugiere que llevaba un tiempo considerable sin vida, sembrando aún más interrogantes sobre lo sucedido.
El hallazgo se produjo alrededor de las 2:25 de la madrugada, cuando los agentes ingresaron al domicilio alertados por la presencia de intrusos. Un fuerte olor nauseabundo los condujo hasta una de las habitaciones, donde se encontraron con la macabra imagen: el cuerpo de Fernández en avanzado estado de momificación, sujeto al colchón con un lazo. Junto a él, varios blisters vacíos de medicamentos completaban el sombrío panorama.
Si bien los primeros exámenes superficiales no revelaron signos evidentes de violencia externa, la fiscal de Homicidios Culposos, Valeria Piazza Iglesias, ordenó de inmediato la realización de una autopsia para determinar la causa precisa y la data de fallecimiento. Esta medida busca descartar cualquier hipótesis de un deceso no natural y arrojar luz sobre las circunstancias que rodearon la muerte de Fernández.
El relato de una vecina lindera añadió un elemento aún más perturbador al caso. La mujer testificó haber presenciado, poco antes de la llegada de la policía, cómo los ocupantes de un Renault 12 violentaban la puerta de la vivienda y posteriormente se retiraban del lugar llevándose colchones. Su testimonio reveló, además, un dato escalofriante: hacía aproximadamente un año y medio que no veía a Guido Fernández, lo que plantea serias dudas sobre cuándo y cómo se produjo su muerte, y cuánto tiempo permaneció su cuerpo inerte en la vivienda mientras era, aparentemente, usurpada.
La investigación se centra ahora en desentrañar la cronología de los hechos. ¿Cuándo falleció Guido Fernández? ¿Fue su muerte por causas naturales, como sugieren las primeras observaciones, o hubo intervención de terceros? ¿Quiénes son los individuos que usurparon la vivienda y qué relación tenían con el fallecido? ¿Por qué se llevaron colchones y no alertaron sobre la presencia del cuerpo? Estas son algunas de las preguntas que la justicia intenta responder en este macabro caso que enluta y conmociona al barrio Hospitales, dejando al descubierto una historia de soledad, usurpación y un final trágico aún por esclarecer.