El Nuevo Penal de Alta Seguridad que Aislará a los Narcos y Sicarios Más Peligrosos de Santa Fe
Con una inversión millonaria y una capacidad para albergar a más de 1.100 presos de alto perfil, la construcción de esta mega cárcel en Piñero promete transformar el sistema penitenciario de la provincia.
Este miércoles, el Gobierno de la Provincia de Santa Fe dio inicio a la construcción de lo que se conocerá como El Infierno, el primer penal de alta seguridad diseñado para alojar a los delincuentes más peligrosos de la provincia, como narcos y sicarios. Ubicado detrás del predio existente de la Unidad Penal 11 (UP11) en Piñero, el nuevo centro de reclusión tendrá una capacidad para 1.152 internos, quienes serán aislados en pequeños grupos para minimizar el riesgo de fugas y la continuación de actividades delictivas desde el interior.
El ministro de Justicia y Seguridad, Pablo Cococcioni, expresó con firmeza que “el año que viene este lugar va a estar terminado y en pleno funcionamiento”, y destacó que la nueva cárcel será clave para aislar a los criminales de alto perfil, contribuyendo así a la seguridad de la sociedad. Además, subrayó la necesidad de mejorar el sistema penitenciario de la provincia, que había sufrido años de paralización. “Vamos a terminar esta gestión con más de 16.000 plazas carcelarias”, afirmó Cococcioni, al tiempo que destacó que la obra tiene un costo de más de $109.000 millones.
La nueva cárcel contará con una infraestructura única y tecnológica, diseñada para garantizar la seguridad dentro y fuera del establecimiento. Cada uno de los cuatro minipenales tendrá capacidad para 280 reclusos, distribuidos en pabellones de 12 celdas. Además, se contará con un doble muro perimetral de 1.800 metros de largo por 10 metros de alto, con un sistema de vigilancia que incluirá cámaras, torres de observación y un helipuerto para emergencias.
Lucía Masneri, secretaria de Asuntos Penales, explicó que esta nueva estructura permitirá categorizar a los internos según su peligrosidad y evitará que los presos de bajo perfil sean cooptados por bandas narcocriminales. Asimismo, destacó que la cárcel también permitirá albergar tanto a hombres como mujeres, con un sistema de distribución que asegura la separación de los distintos tipos de delincuentes.
La obra, que se desarrollará en un predio de 30 hectáreas, se completará en septiembre de 2026 y está pensada para reducir significativamente la capacidad de las cárceles tradicionales, evitando que los presos más peligrosos puedan tener contacto con otros reclusos. Además, el complejo contará con sistemas de inhibición de señales para prevenir las comunicaciones ilícitas y el uso de tecnología para investigaciones de criminales.
Con El Infierno, la provincia de Santa Fe da un paso hacia la modernización de su sistema penitenciario, con un enfoque en la seguridad, el aislamiento y la prevención del delito. Este ambicioso proyecto busca garantizar que los criminales de alto perfil no puedan seguir operando desde el interior de las cárceles, asegurando así un futuro más seguro para la comunidad.