“Se llevaron todo… menos las palas”
En la madrugada del martes, la ONG La Colmena, un espacio educativo y cultural ubicado en la ciudad de Granadero Baigorria, sufrió un robo que dejó conmocionada a la comunidad. La organización, que se dedica a brindar talleres educativos, apoyo alimentario y asesoría a familias vulnerables, se vio afectada por la pérdida de diversos elementos destinados a sus actividades, que se utilizan para recaudar fondos y mantener sus proyectos.
Los delincuentes ingresaron al establecimiento de manera violenta, rompiendo puertas y saqueando dos depósitos ubicados en el patio del lugar. Entre los objetos robados se encuentran una bicicleta que la ONG tenía para realizar un sorteo con fines recaudatorios, dos ventiladores que aún no habían sido instalados, varios equipos electrónicos y material de oficina que utilizan para llevar a cabo sus actividades diarias. En un giro insólito, los ladrones dejaron atrás las palas que pertenecían a un proyecto de jardinería que la ONG había adquirido con mucho esfuerzo.
“Lo que más nos sorprendió fue que se llevaron prácticamente todo, pero dejaron las palas”, comentó uno de los miembros de La Colmena, visiblemente afectado por el hecho. Además, destacó que los delincuentes causaron destrozos en el lugar y, como si fuera poco, dejaron rastros de su presencia en el patio, donde incluso defecaron. La escena de la infracción fue perturbadora, y el equipo de la ONG tuvo que tomar medidas inmediatas para reforzar la seguridad del lugar.
El robo, que ocurrió entre las 8 de la noche y las 8 de la mañana, no es el primer intento que sufre el espacio. El domingo anterior, se había registrado una primera alerta, aunque en ese momento el hecho no fue considerado grave, ya que se pensó que simplemente alguien había merodeado por el lugar sin mayores intenciones. Sin embargo, al día siguiente, los daños fueron evidentes: puertas rotas, objetos revueltos y el robo de herramientas y materiales esenciales para las actividades del centro.
“La Colmena lleva funcionando en esta casa hace dos años, y en total lleva ocho años operando en la ciudad. En este tiempo, hemos trabajado de manera comprometida con la comunidad, ofreciendo una variedad de servicios educativos, sociales y de apoyo a los más necesitados. Ahora nos enfrentamos a la difícil situación de tratar de recuperar lo robado para continuar con nuestra labor”, explicó el responsable del espacio.
A pesar del robo, La Colmena se mantiene firme en su misión. La ONG ha reforzado las medidas de seguridad y está buscando apoyo para recuperar los elementos robados. Invitan a quienes deseen ayudar a ponerse en contacto a través de sus redes sociales, donde mantienen información actualizada sobre su trabajo y cómo pueden colaborar.
