El secretario de un juez federal fue suspendido de su cargo por 15 días

Gendarmería Nacional llevó a cabo allanamientos en el marco de una investigación por coimas y evasión impositiva. Entre los involucrados se encuentra el secretario de un juez federal, quien fue suspendido preventivamente durante 15 días.

En una serie de operativos llevados a cabo este jueves por Gendarmería Nacional ejecutó allanamientos en diferentes puntos del país, bajo la órbita de la justicia federal, en una causa que involucra a varios actores del ámbito judicial y tributario. La investigación se centró en un supuesto esquema de coimas y evasión impositiva, en el que estarían implicados empleados de la ex AFIP, Aduanas, y hasta un estudio jurídico. El caso también involucra al juez federal Marcelo Bailaque, quien, por el momento, no ha sido directamente imputado, pero su secretario, Gustavo Guazzaroni, fue suspendido preventivamente por la Cámara Federal de Apelaciones de Rosario, en función de las sospechas que emergieron durante la pesquisa.

Los allanamientos, solicitados por la justicia federal, apuntan a desmantelar una posible red de corrupción dentro de los procesos judiciales relacionados con delitos tributarios. Según las sospechas, este grupo habría operado un sistema de “arreglos” para evitar que las personas acusadas de delitos tributarios enfrentaran un juicio y una posterior sanción económica, a cambio de sobornos. Si bien la investigación aún se mantiene bajo reserva, se ha filtrado que las personas implicadas en este esquema incluyen a figuras con un peso considerable en el ámbito judicial y tributario.

Uno de los detenidos clave en los allanamientos fue el ex vicepresidente de Newell’s Old Boys, Pablo Alegri, quien hasta hace poco ocupaba dicho cargo. También fue allanada la vivienda de Carlos Baudaña, ex titular de la AFIP de Rosario, quien ya había estado involucrado en una causa relacionada con el escándalo de Vicentín en 2022, aunque con una probation pendiente por un delito financiero. Además, secuestraron teléfonos celulares y otros dispositivos que serán peritados para determinar el alcance de la posible trama de corrupción.

Lo que ha llamado la atención en el caso es la figura de Marcelo Bailaque, quien no puede ser suspendido de forma preventiva debido a su estatus de juez federal. En su lugar, el secretario Guazzaroni fue apartado de su cargo por 15 días, a la espera de que se determinen responsabilidades. En cuanto al juez Bailaque, se especula sobre la posibilidad de que la situación derive en una mayor investigación en su contra, aunque para ello será necesario recurrir al Consejo de la Magistratura.

Este escándalo tiene un trasfondo complejo, ya que se ha hablado de una posible “internación” o disputa interna entre los jueces de instrucción, Carlos Vera Barros y Marcelo Bailaque. La firma de los allanamientos por parte del juez Eduardo Rodríguez de Cruz ha generado aún más suspicacias, ya que, a pesar de ser un juez de la Cámara, Rodríguez firmó los procedimientos al estar de turno como juez de garantías.

En medio de todo esto, los nombres involucrados, sumados a las sospechas sobre un posible vínculo con el negocio de la hidrovía, dejan entrever la magnitud del caso. La investigación sigue su curso y se espera que en los próximos días surjan nuevos avances, mientras la sociedad observa atónita cómo algunos de los actores más influyentes en el sistema judicial y tributario están siendo señalados por un presunto esquema de corrupción de gran escala.