El acusado, presunto líder de una red delictiva, enfrenta cargos por estafas, encubrimiento y amenazas. Se le atribuye la coordinación de una organización que defraudó a múltiples víctimas a través de concesionarias de autos en Rosario.

El pasado 20 de septiembre de 2024, en el Centro de Justicia Penal de Rosario, se llevó a cabo una audiencia imputativa contra Alexis Guarda, acusado de liderar una asociación ilícita dedicada a cometer estafas reiteradas, encubrimiento agravado y amenazas calificadas. El fiscal Fernando Dalmau presentó cargos que vinculan a Guarda con 58 hechos de fraude relacionados con la compra y venta de automóviles en la ciudad.

Durante la audiencia, el juez de primera instancia, Dr. Negroni, formalizó la imputación, disponiendo la prisión preventiva de Guarda hasta la audiencia preliminar. Además, se ordenó la inhibición de sus bienes, debido a la gravedad de los delitos.

Se acusa a Guarda de encabezar una organización que operaba bajo la fachada de varias concesionarias de autos ubicadas en Av. Pellegrini 3100 y Pasaje Independencia al 3200, donde engañaban a las víctimas mediante contratos fraudulentos de compraventa y consignación de vehículos. La red de estafadores captaba a sus víctimas a través de plataformas digitales como Facebook Marketplace y redes sociales, donde ofrecían la compra de autos usados.

Una vez que los clientes confiaban en la legitimidad de las operaciones, firmaban documentos falsos y entregaban vehículos y dinero, con la expectativa de completar la transacción. Sin embargo, los autos nunca eran entregados y el dinero desaparecía, generando un perjuicio económico significativo para las víctimas.

El esquema involucraba a varios miembros de la asociación, quienes recibían el dinero de las víctimas y gestionaban las operaciones. Además de Guarda, otros implicados incluyen a vendedores y gestores de las concesionarias, quienes participaron en la defraudación.

La investigación también reveló que la organización utilizaba oficinas en el microcentro de Rosario para realizar las maniobras de estafa, mientras que algunos miembros llegaron a intimidar a las víctimas cuando estas reclamaban los bienes o el dinero perdido.

La audiencia concluyó con la prisión preventiva de Guarda, mientras las autoridades continúan investigando la extensión de la red delictiva y el número de afectados. Hasta el momento, se han identificado decenas de víctimas que sufrieron importantes pérdidas económicas