Quiso matar al actual líder del paravalanchas rojinegro, para ocupar su lugar

En un nuevo capítulo de la violencia en el fútbol argentino, Alejandro Nicolás Ficcadenti, conocido como “Rengo Fica“, fue imputado este viernes por los delitos de homicidio agravado en grado de tentativa, amenazas coactivas y abuso de armas, en el marco de una disputa por el liderazgo de la barra brava de Newell’s Old Boys.

Junto a Ficcadenti, fue imputado Brian Walter Ledesma, quien se desempeñó como ejecutor material de los ataques ordenados por el líder barrista. Ledesma enfrenta cargos por portación ilegal de arma de fuego, amenazas coactivas, abuso de armas, resistencia a la autoridad y encubrimiento por receptación.

Según la acusación de los fiscales Carbone y Socca, Ficcadenti habría instigado un ataque a tiros contra el domicilio de Lucho Gallardo, actual líder de una facción rival de la barra brava, el pasado 13 de julio. Como consecuencia de este ataque, un adolescente de 16 años, familiar de Gallardo, resultó gravemente herido con múltiples impactos de bala.

Además, se atribuye a Ficcadenti y Ledesma la planificación y ejecución de otro ataque armado ocurrido el 24 de julio, en el que se dispararon al menos once tiros contra un domicilio en la calle Coulin al 2000 de Rosario, hiriendo a una persona en una pierna.

“Tenemos mucha evidencia. Para terminar la pregunta anterior, los dos hechos imputados fueron balaceras. Uno, concretamente, tentativa de homicidio de hijastro, de Lucho Gallardo, jefe de una facción que opera y que lidera la barra brava de Newell’s“, afirmó el fiscal Carbone en conferencia de prensa.

La investigación de los fiscales reveló la existencia de una fuerte disputa entre dos facciones de la barra brava de Newell’s, lideradas por Ficcadenti y Gallardo, respectivamente. Esta disputa se habría intensificado en las últimas semanas, con una serie de hechos violentos que incluyeron amenazas, balaceras y enfrentamientos entre ambas facciones.

“Es una disputa muy violenta. Se están disputando las personas que están detrás del paravalancha. Sabemos muy bien que hace muchos años la barra de Newells se está regenteada por personas que están en la cárcel y van a estar en la cárcel mucho tiempo más”, agregó Carbone.

El juez de Primera Instancia, Pablo Pinto, dictó la prisión preventiva efectiva para ambos imputados, considerando la gravedad de los hechos y el peligro de fuga.

Este nuevo caso pone de manifiesto la problemática de la violencia en el fútbol argentino y la necesidad de tomar medidas urgentes para combatir este flagelo. Las autoridades judiciales y policiales continúan trabajando para desarticular las bandas criminales que operan en el entorno del fútbol y llevar a sus integrantes ante la justicia.