El procedimiento lo llevó adelante la Policía Federal y fueron dos personas las detenidas
Personal de la Superintendencia de Investigaciones, del Departamento Antisecuestros Norte, allanaron una casa donde la investigación criminal mediante el uso de elementos técnicos recientemente incorporados a la fuerza permaneció cautiva una víctima de secuestro. Este domicilio le pertenece a un empleado del Ejército Argentino, quien presta servicios en el Batallón de Arsenales 603, en Santa Fe, lugar donde se produjera la detención del mismo.
Según se desprende de la pesquisa, el hombre habría facilitado una casa que posee en obra, para guardar el pasado 14 de Abril, a un joven, que había sido secuestrado por dos vecinos.
El hecho ocurrió la madrugada del viernes 14 de abril, cuando la víctima, quien presenta capacidades diferentes y es insulino dependiente, salió de trabajar del Bar Galvense, sube a su bicicleta para volver al hogar, pero en el camino, es interceptado por dos hombres, que lo tiraron al piso para reducirlo, lo maniatarlo, cubrirle la cabeza y obligarlo a subir a un Ford Focus gris.
Sus padres se percataron de lo que había pasado a las 6.40, cuando uno de los secuestradores llamó por teléfono a la mamá, usando el celular de la víctima y pidiendo doscientos mil dólares para liberar al muchacho. La familia, inmediatamente llamó a la Central de Emergencias 911 y en poco tiempo se activó un operativo de rescate, encabezado por el Fiscal Federal Gustavo Onel junto con personal de la Federal.
Apenas una hora más tarde, un equipo de investigadores del Departamento Antisecuestros de la misma fuerza arribó a Rosario en helicóptero para sumarse al trabajo y aportar su experiencia, que fue crucial para resolver el hecho. Para ese entonces, los teléfonos de madre e hijo habían sido intervenidos y las escuchas eran directas. Con el devenir de la negociación y con la ayuda de los expertos en antisecuestros, se logró bajar la pretensión exigida por los captores (rescate) a la suma de cinco millones de pesos
Finalmente, los delincuentes decidieron liberar al muchacho sin recibir a cambio billete alguno, presumiblemente por el asesoramiento prestado por los policías a la familia, lo que fue importante ya que el estado de salud del muchacho, no era el mejor, es diabético insulinodependiente y no tenía la medicación.
El joven apareció al mediodía, en zona rural de Ricardone, en un camino entre San Lorenzo y Andino, cerca del domicilio donde estuvo secuestrado, hoy allanado, perteneciente al integrante del ejército.
Los investigadores no se relajaron y avanzaron para individualizar a los responsables, quienes en principio resultaron ser dos vecinos de los damnificados, de 35 y 36 años
El viernes 21 de Abril por la mañana, los dos hermanos fueron apresados por la Policía Federal en una serie de allanamientos realizados en ese momento. Y este viernes, lograron determinar la participación como “facilitador” al integrante del Ejército de 40 años, quien será indagado por la justicia en las próximas horas